miércoles, enero 23

Me atacó la paranoia (de nuevo)

Ayer en la tarde estaba platicándole a Thelma un incidente muy penoso que -creo- me sucedió (leálo lo mas rápido que pueda y sin hacer pausa): estabarevisandomismailsantiguosysinquereabriunoconfotoscomprometedorasyunodemiscolegaslavio. Me puse roja roja, sentía la adrenalina y por más que trataba de cerrar la página, este pinche Explorer de ultima tecnología se resistió.

Según yo pasaron como 3 minutos, pero gracias a la virgencita que está 25% más llena de gracia que yo, solo fue cuestión de segundos. Hasta pensé en decirle a Thelma -no mames, si mi paranoia no me falla, este cabrón me verá con ojos de lujuria, le contará a todos y debido al porte principesco que me caracteriza levantaré pasiones de semana inglesa antes de la primavera... pero no, nada de eso pasó.

Temerosa del reencuentro, hoy en la mañana llegué y lo primero que dijo fue: en un programa de radio escuché una frase de Rubén Darío "la vida sin la mujer es prosa"...
-y?
-¿te gusta la poesía?
-no, soy del tipo prosa.

y ya, se voltió y no habló más, joder.